Como cualquier otra
persona-animal yo también fui pequeño una vez, no aparecí de la nada como
algunos puedan llegar a pensar. Como cualquier otra persona tuve una infancia
podíamos decir que normal: tenía mis amigos, jugaba al fútbol con un balón de
plástico barato que se iba en todas direcciones menos hacía donde querías
chutar, soñaba, imaginaba, y como cualquier otro joven: fui Friki.
Mi caso vino de mano de los conocidos wargames que
para que todo el mundo sepa que son comentar que son esos juegos a los que se
juega con muñequitos de plomo-plástico. En ese mundo entraba y de manera clara
y lógica el mundo del rel más puro: lápiz, papel y mucha imaginación, eran
buenos tiempos.
Supongo que os estaréis extrañando que haya llegado hoy
contando anécdotas de mi infancia pero como en esta vida todo tiene un porque.
Y es que hoy en día el uso de la tecnología está tan dentro de nuestras vidas
que sería capaz de apostar mi laaaaaaaaarga cabellera a que hoy en día la mayoría seriamos capaces de vivir sin nada de tecnología, ni siquiera un reloj.
De acuerdo: la tecnología
usada con responsabilidad es todo un acierto pero cuando el uso no es el correcto las cosas cambian.
Hace años dije que si alguna vez tenía un hijo (….) antes le compraría un juego
de rol antes que un pc-tablet o cualquier tipo de pantalla interactiva, el
motivo no es otro que con un juego de rol aparte de sociabilizarse más un niño
debe usar más su imaginación pudiendo crear un universo tan grande y mágico
como él desease.
Es por eso que debo dar una
más que merecida colleja y un sonoro gruñido a aquellos padres que dejan
tabletas, pc, teléfonos móviles a sus hijos pequeños principalmente de menos de
10 años. Esto, y como la mayoría de opiniones de este blog, no solo impide a un
niño que sea niño sino que le impide
sociabilizarse y conocer conceptos de la vida en general que a través de una
pantalla no se pueden llegar a conocer.
Dejad que los
niños sean niños que ya crecerán y tendrán todo el tiempo del mundo de
acabar enganchados a un ordenador o tablet. Tal y como escribí en una novela:
un niño es un niño hasta que un adulto le diga lo contrario pero un adulto es
adulto hasta que un niño le demuestre lo contrario.
Y dicho esto…hasta mañana ^_^
No hay comentarios:
Publicar un comentario