Una de las cosas que solemos
hacer en este blog, sitio, o como queramos llamarlo, no es otra cosa que
valorar más el aspecto humano antes que el tecnológico. Esto es algo que nos
hace comprender como avanza tanto la tecnología, base de este lugar, como valorar
las personas que hay detrás de cualquier aspecto tecnológico... Siempre hemos
dicho que detrás de esa web que tu visitas, ese foro en el que escribes, ese
videojuego al que juegas o esa creación que disfrutas, hay una o varias
personas, que han dedicado parte de su vida, en crearlo, y este trabajo no
siempre se ve compensado. Y ahí, la gente que hace posible este lugar, es algo
que vamos a evitar, antes personas que máquinas.
Así que tras estas palabras ¿Qué
tal si ponemos mi voz? Una voz de esas firmes, contundentes, de esas que apenas
suenan, pero que cuando lo hacen…lo hacen:
“Quizás dos mil diecinueve, no
haya sido un año memorable en cuanto a productividad, aunque claro, siempre hay
un porque. Comencé el año con el propósito de “finalizar algún proyecto”, cosa
la cual hice al principio de año: objetivo anual cumplido, ahí, con un par
¿para qué proponernos proyectos que sabemos que no vamos a cumplir? Pero llegó
marzo, y debo reconocer que ese mes, supuso un antes y un después.
A medida que avanzamos por la
vida, vamos acumulando recuerdos, personas, experiencias, emociones, y un largo
etc. que se convierte en un “carga”, y si pongo “carga” entre comillas no es
por otra cosa que creo que es algo relativo, una carga puede ser tanto soledad
como sonrisas, y en ambos sentidos, la vida tiene mucho que decir. Tal y como
iba comentando, la carga de tantos recuerdos, personas, experiencias, etc…hizo
que necesitase un viaje personal ¿para qué hacerlo de manera simple? Nah, no es
mi estilo. Así que decidí arrasar con todo cuanto me rodeaba, a lo bestia,
directo. Aquello que te mantiene en pie se va fuera, o al menos esa es la base.
Cuando uno se deja caer, y siendo
consciente de que “caer no es más que volar en una dirección distinta”, sabe
que llegará un momento, en el que remontes el vuelo. Pero para ello, tienes que
caer ¿para qué hacerlo? Había que comprobar que era lo que realmente te
mantiene en pie.
Y esto llegó en julio, cuando
comprobé como debemos asumir lo que realmente somos, como aquello que una vez
nos hizo feliz pero de lo cual, por circunstancias de la vida, dejamos, es lo
tenemos que tener siempre cerca. Así que en julio, comprobé que a pesar de
renegar de cierto ser de alas negras, debía asumir su realidad. Por otro lado
¿el mundo de las letras? Siempre ha sido mi vida, y en julio, comprendí que
debía seguir creando esos textos que suelen aparecen en “Siempre nos quedará
volar”, estos han creado sonrisas y para mí, eso es lo realmente importante,
asi que les letras, van a seguir siendo vida.
Quizás a partir de septiembre
comencé a notar la parte del porque es necesaria potenciar al ser de alas
negras. Que no acepte una sociedad que considero egoísta, individualista y nada
empática, es evidente, y mí rugido hacia esa sociedad, fue evidente: lo siento
pero ¿recordáis cuando subisteis a mi vida? Lo siento pero el viaje finaliza
aquí así que…y estoy siendo educado.
Como cualquier otra persona, como
tú que me lees preguntándote porque un blog de tecnología tiene una parte
“poética” ¿has leído más arriba? Así me gusta, ahora sigue leyendo, he conocido
gente alucinante, a pesar de que reneguemos del mundo en el que vivimos,
todavía queda gente alucinante a la que conocer.
A sido un año personal, con todo
lo que ello implica. Un año en el cual, debí comenzar a asumir la realidad de
lo que soy, un año de despedidas, de alucinantes bienvenidas, quizás no haya
sido mi año más productivo, pero gracias a la gente que he conocido, a sido
alucinante. Un año en el que retomé la escritura manual, en el que mis otros lugares,
“Siempre nos quedará volar” y “Una eternidad entre palabras”, han creado
sonrisas siendo esto una sorpresa que me hace comprender que debo tanto mejorar
como continuar, ha sido el año de las cartas, del silencio y…de la gente.
Aunque está claro, este año es el
inicio de algo, y si, las alas negras van a moverse, o al menos eso espero, y
habrá decisiones que no se comprendan, habrá movimientos realmente brutos para
mí pero que espero que hagan sonreír a personas que seguramente, ni conozca, a
las que conozco ¿realmente hay gente que solo hace sonreír a los que os rodean
en contadas ocasiones? Y luego se quejarán de porque rechazo este modelo de
sociedad… A las personas que conozco, esas me tienen que sufrir haciendo el
salvaje. Claro que hay gente que se queda en este año ¿y sinceramente? Y aunque
suene bestia por mi parte: me la suda. Me quedo con los que están.
Sea como sea el año que entra, ya
entrará ¿para qué preocuparse por algo que no ha sucedido?, sea como sea, ya
llegará.
Y dicho esto…hasta mañana ^_^
Psyko
No hay comentarios:
Publicar un comentario